Si te pones a pensar te podrás dar cuenta de
que cada persona es como un árbol. Si, parece
algo ilógico pero en realidad tiene su lógica, mira:el tronco muestra
la valentía y lo fuerte que puede llegar a ser una persona al afrontar todos
sus problemas. Siempre permanecerá de pie, ni el viento ni la lluvia podrán con
él; Las ramas son cada sentimiento, cada alegría, cada sonrisa, cada momento
difícil que han permanecido y permanecerán sujetas a ti, un peso ligero o duro
que tendrás que llevar siempre contigo. Las hojas se podrían dividir en dos:
las que se quedan en las ramas, que son los momentos felices, las personas por
las que tú quieres luchar y nunca te abandonan; las otras hojas, las que se caen al suelo, representa cada persona que te ha fallado,
que te ha hecho daño; son las que se quedaron en tu pasado. Cada lágrima caída
por miles y miles de sentimientos y sensaciones, en los cuales tú has permanecido
de pie y nunca te has caído ya que has sido tan fuerte como el tronco de un
árbol.